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Puntas de viajes para los viajeros a Camboya

Como los visitantes crecientes internacionales a Camboya llegan por avión en Phnom Penh o en Siem Riep en los años recientes.

Visita a Vietnam y Camboya en vacaciones

Si usted es el tipo que disfruta de las vacaciones raras y las áreas de exploración del mundo que el más no hace, tengo algunas ideas para usted en viajes a Vietnam y Camboya.

Descubra los tesoros del Sudeste de Asia

De su cocina dulce y picante a selvas lozanas y densas y playas increíblemente magníficas, no hay una parte entera no parecido sobre la Asia del Sudeste.

¿Qué debes saber para viajar a Camboya?

Empezaré hablando un poco de dos cuestiones básicas que hay que tener en cuenta en los viajes que realices a cualquier país del mundo: la documentación que debes llevar y la moneda que rige la economía del país en cuestión.

La Bahia de Halong, viajes Vietnam

Paisaje fascinante de islas e islotes en Vietnam.

sábado, 27 de junio de 2015

Todos lo que tiene que preparar en el botiquín de viaje

Cuando unoprepara un viaje, sea cual sea el destino, su duración y la forma de realizarlo, debe plantearse en llevar consigo un botiquín básico para situaciones imprevisibles que pueden suceder durante nuestra estancia fuera de casa. No quiero ser agorero ni pesimista, pero hay que ser previsor y estar preparado ante cualquier contratiempo para que nuestro viaje no se convierta en una pesadilla. Y como precisamente estoy preparando mi viaje a Laos y Camboya he creído oportuno hablaros del botiquín que voy a preparar para llevarme conmigo. Yo no soy de los típicos “viajeros-farmacia ambulante” que llevan de todo pero esta vez al estar casi 3 semanas por el sudeste asiático voy a tener que aplicarme en el asunto ( pero sin pasarme que la mochila no puede pesar una tonelada…). 


No todos los viajes son iguales así que mis recomendaciones se basan en este viaje que voy a realizar al sudeste asiático sin rumbo fijo y mochila al hombro, lo que me va a suponer preparar a conciencia un buen botiquín que me saque de algún apuro ocasional. Os cuento que llevar en el botiquín de viaje:

1. Analgésicos/antitérmicos: paracetamol ( para la fiebre) e ibuprofeno son fundamentales.

2. Antialérgicos/Antihistamínicos: antihistaminicos orales o un corticoide local para alergias, picaduras….

3. Antibióticos: sólo se utilizan en caso de no poder acudir al médico y ante la presencia de fiebre alta. Según me recomienda sanidad exterior, ” la asociación amoxicilina-ácido clavulámico puede ser una buena alternativa” ( si alguien se entera de que quiere decir esto me lo explique por favor..).

4. Antidiarréicos: En caso de diarrea leve o mederada nos suelen recomendar dieta absoluta 24 horas y muchas sales de rehidratación oral ( Sueroral) y zumo de limón. Si la diarrea se reduce se pueden usar antidiarréicos como el spiraxin. Y el almax nunca viene mal cuando el estómago protesta más de la cuenta.

5. Termómetro: nunca está de más ya que ocupa poco y pesa menos aún.



6. Protectores solares: Fundamentales para tener nuestra piel protegida. Cremas para cara y cuerpo con filtro solar alto o pantalla total.

7. Materiales de cura: gasas estériles, esparadrapo, tiritas, solución antiséptica ( llámese betadine), tijeras…..

8. Desinfectantes de agua no potable y sales de rehidratación oral: El agua en mal estado es una de las principales causas de contagio del viajero. Si por alguna causa nos inoportuna la temida diarrea del viajero, hay que rehidratarse mucho.

9. Repelentes de mosquitos y otros insectos: Sobre todo si se va a zonas tropicales donde los mosquitos acosan o con contagio de malaria. Llevar repelente que contenga estas siglas: DEET. En mi caso llevaré relec extra fuerte, que me fue bien en el anterior viaje a Tailandia. 

10. Si se va a zonas de riesgo llevar la medicación para el paludismo o la Malaria. Nosotros llevaremos Malarone, que dicen no tiene muchos efectos secundarios….ya os contaré porque todavía no sé si la tomaré…

Puesto callejero en Bangkok
Y termino con unos consejos generales para evitar contraer el cólera u otras enfermedades trasmitidas por el agua y los alimentos. Lo primero es viajar debidamente vacunado pero no está de más recordar algunas precauciones a tener en cuenta y que son válidas para viajar a países donde las condiciones higiénicas no son como debieran:

– Comer alimentos bien cocinados y servidos todavía calientes ( platos cocinados y guardados durante horas son un foco de infección).

-Evitar consumir pescado y marisco crudo.

– Consumir sólo leche envasada y derivados lácteos debidamente higienizados.
– Los helados, si no es muy fiable el establecimiento, es mejor no probarlos ya que pueden estar  contaminados.

– Cuidado con la comida en los puestos callejeros, pueden resultar peligrosa ( asegurarse antes que hay “un mínimo de higiene” en el puesto).

– Beber solo agua embotellada o desinfectarla si fuera necesario. El té, café, zumos embotellados, vino o cerveza embotellada ( menos mal…) puede consumirse con tranquilidad.

– No tomar hielo, a menos que se esté seguro que se ha preparado con agua segura.

– Evitar cepillarse los dientes con agua insegura. Usar agua embotellada, que es más segura. 


  Una buena frase del ministerio de sanidad exterior resume como tomar alimentos en nuestro viaje: “cocinado, pelado o no tomado”
Y si todo el arsenal médico que llevamos no es suficiente, que mejor que llevar contratado un seguro de viajes para tener las espaldas bien cubiertas. Nosotros lo tenemos con IATI Seguros porque varios viajeros me han hablado maravillas y después del encuentro de bloggers de Gredos quedamos encantados con ellos.

Como suponéis no soy un entendido en estos temas médicos, ni mucho menos. El sentido común y algunas recomendaciones de sanidad exterior nos deben bastar para que nuestros viajes sean más seguros y disfrutemos de uno de los mayores placeres que hay en esta vida.

martes, 23 de junio de 2015

7 trucos de lujo para ahorrar dinero en el sureste asiático

Con alojamiento, comida y cerveza barata, el sureste asiático es el destino perfecto para cualquiera que viaje con un presupuesto ajustado. Vietnam, Camboya, Laos o Tailandia. Da igual dónde vayas; el sureste asiático con poco presupuesto no tiene secretos. Pero el coste del transporte, los desplazamientos y los suvenires porquería pueden hacer que acabes pagando más de lo que esperabas. Aquí tienes ocho trucos de lujo para asegurarte de que estos extras no te dejan sin blanca.

1. Escoge autobuses o trenes nocturnos
Siempre que puedas, intenta reservar un autobús o tren nocturno. El transporte de larga distancia en el sureste asiático es baratísimo y la red, bastante extensa. Muchos autóctonos escogen viajar de noche porque los billetes son más baratos y el viaje, relativamente cómodo. La mayoría de trenes y autobuses tienen literas o asientos reclinables y aire acondicionado. Hay viajeros a quienes no les gusta viajar de noche por temas de seguridad, pero conlleva el mismo riesgo que viajar de día; simplemente asegúrate de no perder de vista tus pertenencias y estate atento a tu alrededor. Te ahorrarás una noche de alojamiento y no tendrás que sacrificar tiempo de día que podrías invertir en visitar templos o tomar el sol.

Autobuses en Vietnam
                                                              Autobuses en Vietnam

2. Escoge un asiento en vez de una litera
Si decides viajar de noche en tren, los asientos son la opción más económica. Lo más sensato sería escoger una litera (suele haber cuatro camas en dos niveles por compartimento), pero a menudo están llenas de chinches. No te equivoques, los asientos no es que sean como ir en primera clase, pero al menos tienes más espacio vital y son totalmente reclinables; y además son la opción más barata si quieres comodidad básica. Actualmente, están renovando los trenes en Vietnam y los vagones de los años 60 y 70 se cambian por modelos coreanos más modernos. Tendrás las mismas comodidades en un asiento que en una litera, incluido el aire acondicionado y el carrito de comida. Lo que no te puedes olvidar son los tapones para los oídos. 

3. Come comida callejera 
Hay muchos viajeros que no se acercan a la comida callejera por miedo a indigestiones o cosas peores. Pero la verdad es que en las calles del sureste asiático se pueden encontrar alimentos de lo más fresco y barato. Pagarás más por comer «comida occidental» comparado con la minucia que pagas por probar cosas muy sabrosas (desde fideos con pollo a donuts de sésamo) en los puestos callejeros. Los vendedores compran sus productos frescos cada mañana en los mercados locales, así que seguro que comerás algo auténtico. Escoge un puesto popular, haz como los autóctonos y adelante.

Comida callejera Hanoi, Vietnam
                                                       Comida callejera Hanoi, Vietnam

4. Bebe Bia Hoi
Con la bebida, escoge lo autóctono si no puedes salirte de presupuesto. Cada día, sobre las cinco de la tarde, las cafeterías de Vietnam salen a la calle y llenan las aceras de mobiliario de plástico rojo y botes de palillos. Esto solo significa una cosa: la hora de la Bia Hoi. O sea, pintas a 10 céntimos y tapas asiáticas, como espinacas fritas y dumplings de ternera a unos 50 céntimos el plato. Pilla un taburete y observa el mundo mientras te hartas por casi nada. Este ritual diario es bastante común en todo el sureste asiático y cada país o ciudad tiene su versión de la Bia Hoi, la cerveza fabricada en Hanói. Aprovéchate de estos precios ridículos, prueba comida casera de lo más sabrosa y conoce gente del lugar.  

Bebe Bia Hoi Hanoi, Vietnam
                                                             Bebe Bia Hoi Hanoi, Vietnam

5. Regatea
No tengas vergüenza si quieres conseguir una ganga. Asegúrate de regatear en los mercados si quieres pagar el mejor precio por cualquier cosa, desde te o café a objetos de diseño de imitación. Los tenderos al menos esperan que pidas un descuento, así que no hay de qué avergonzarse. A menudo el precio sube cuando se dan cuenta de que eres turista, así que hay margen para negociar el precio de ese bolso «Prado» o esas zapatillas de seda. Sé tozudo y conseguirás más de una ganga, además de tener más calderilla para la Bia Hoi.  

6. Deja el cepillo de dientes en casa
La mayoría de albergues y hoteles baratos del sureste asiático ofrecen cepillo y pasta de dientes gratuitos, jabón y hasta maquinillas de afeitar. Ni que decir tiene que no son de la mejor calidad, pero sirven para lo que sirven y así te ahorras comprar todas estas cosas que a menudo cuestan bastante dinero. Además, te ahorrarás un poquito de espacio en la maleta para meter otro bikini o un libro para leer en la playa. 

7. Fija el precio del taxi antes de subir 
Si quieres ir sobre ruedas, los tuk tuk y los taxis abundan en la mayoría de ciudades y pueblos. Sin embargo, antes de subir asegúrate de fijar el precio del trayecto e intenta pedir un descuento. Así te aseguras que el precio del viaje no suba por las nubes una vez hayas llegado a tu destino. Asegúrate de saber la dirección exacta de dónde quieres bajarte. Es sabido que los taxistas dan vueltas y pasan por agencias de viajes y hoteles para intentar convencer a los viajeros para que reserven un tour o cambien de alojamiento para luego cobrar más por el viaje extra. Fijar el precio y saber a dónde te diriges te ayudará a evitar momentos como este y  que no te tomen el pelo.

Tuk Tuks Bangkok, Tailandia

Source: skyscanner.es
Support: viajeindochina.com 

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